Fuente: Ezio Auditore, video por @lizaga96
«Nada es verdad. todo está permitido»
Ezio Auditore da Firenze
Puede que esto suene bastante cínico, y lo sería si fuera una doctrina y no un credo. Su Autor lo justifica diciendo que es una «mera observación de la naturaleza de la realidad».
Decir que «nada es verdad», supone darse cuenta de que los cimientos de la sociedad, son frágiles y que debemos ser los pastores de nuestra propia civilización.
Mientras que decir «todo está permitido» es comprender que somos los arquitectos de nuestros actos y que debemos vivir con las consecuencias, ya sean gloriosas o trágicas.
Permíteme preguntarte ¿Qué hubieras opinado si solo te quedaras con la primera línea de ésta publicación?