Sanar nos hace más fuertes

Fuente: My dad and I had a disagreement… for @luulapants


Mi papá y yo tuvimos un desacuerdo sobre su uso de la frase «Lo que no te mata te hace más fuerte.» Yo dije «No es verdad. A veces lo que no te mata te deja frágil, herido o traumatizado».

Paró para pensar sobre ello por un buen rato. Luego volvió, y dijo, «Es como el pegamento de madera», apuntando a mi librería, la cual me había ayudado a rescatar hace algún tiempo. Me dijo, «¿Te acordás como te expliqué que, una vez que usemos la cola, los estantes se volverían más fuertes de lo que eran antes de que se rompieran?»

Asentí.

«Pero antes de que usáramos el pegamento, la estantería estaba rota, no podía sostener nada. Si hubieras puesto libros, se hubiera colapsado. Encima, ese pegamento tenia que secarse por un rato. Si guardabas algo antes de que secara, también hubiera colapsado de la misma forma como si nunca lo hubieras arreglado en absoluto. A estas cosas les tienes que dar tiempo para que se asienten.»

Sonaba como una buena metáfora para mí, pero me di cuenta que lo que sea que  rompió esos estantes, no era lo que los hizo fuertes. Eso solo los rompió. Fue ser arreglados lo que los hizo más fuertes. Fue el pegamento.

Así que mi papá y yo estuvimos de acuerdo, lo que no te mata en realidad no te hace más fuerte, pero sanar sí. Y si sientes que no te ha hecho más fuerte de lo que eras antes, probablemente no hayas terminado de curarte. Tienes que darle tiempo a estas cosas.


Creo que voy a comenzar una nueva serie de publicaciones llamada «Ayudar cuando no podemos» centrada en consejos o información para aliviar un poco el dolor de otros mientras luchan con sus propias heridas.

Los temas centrales de esta serie son: Comprender, conocer, cooperar.